Córdoba
Ya teníamos ganas de visitar Córdoba, habiendo estado por las otras provincias del sur, era una asignatura pendiente. Cristina se pasó toda la semana en un curso en Granada así que el viernes me acerque yo. Alquilamos un coche pequeño y en menos de dos horas nos plantamos en Córdoba.
El hostal estaba por el centro, por lo que aparcamos el coche y nos dedicamos a pasear calle arriba y abajo. Visitamos la Mezquita-Catedral, los Reales Alcázares, la Sinagoga, las Caballerizas Reales y como no, tabernas, bodegas y casas de vino y tapas.
Es una ciudad que esta muy bien cuidada, la gente es muy agradable y se come bien. Un buen lugar para hacer una escapada de fin de semana, en las calles cercanas a la Mezquita está el punto más turístico, pero el resto de la ciudad es muy tranquila con patios y terrazas.
El domingo nos acercamos a Medina Azahara, una antigua ciudad musulmana, donde se puede ver gran cantidad de restos y que algunos están rehabilitando. Y después salimos de regreso pasando por Montilla, Antequera y llegando al atardecer a Granada.
Un fin de semana al estilo del sur: cañas y tapas, calma y buen aceite, sol y fresco, carreteras sin peajes, un olivo de souvenir,…